Este es un camino de 10 días para reconectar contigo, despertar tu energía y volver a sentirte presente, vivo, libre.
Ayer dimos el primer paso: hacer un pacto contigo mismo.
Hoy, ese “sí” empieza a sentirse en el cuerpo. Porque el cuerpo recuerda… y también guarda.
Y para volver a ti, necesitas volver a habitarlo, a darle acogida, a integrarlo en tu ser.
Muchos de los bloqueos que alimentas con los pensamientos y las emociones que estos generan viven y se sienten en tu cuerpo; en la cabeza, el cuello, los hombros, las articulaciones, el pecho, las piernas… Son faros de contracción que te indican dónde fuiste apagando la fuerza de tu presencia.
Hoy no se trata de entrenar ni de hacer ejercicio.
Hoy se trata sólo de comenzar a sentir y mover tu energía, especialmente en las zonas donde sientas su bloqueo.
Es tiempo de sacudir años de insensible inactividad, de represión silenciosa.
🌀 Moviliza. Afloja. Libera.
En el día de hoy, dedica entre 10 y 15 minutos a realizar estos simples ejercicios:
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Movimientos amplios de cadera, como si bailaras en cámara lenta.
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Sacudidas suaves de piernas, desde las caderas hasta los pies.
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Estiramientos de cuádriceps y parte posterior de las piernas, muslos, sin forzar.
Hazlo despacio, con presencia, brindándole tu atención a cada movimiento y a la reacción de tu cuerpo. Siente como si cada movimiento despertara algo dormido en ti.
🥁 Deja que el ritmo te lleve
Sería ideal que acompañaras este ejercicio con música tribal, con tambores, con percusión, con fuerza. Este tipo de música es muy afín al movimiento de tus piernas.
Cierra los ojos y mueve tu pelvis libremente, sin juicio ni vergüenza, sin pensar si lo haces bien.
Déjate llevar.
No importa cómo se vea. Lo que importa es cómo se siente. Sé intenso. Entrégate a este juego como si fueras un niño apasionado.
🤲 Silencio. Observación. Presencia.
Al terminar, quédate de pie, en silencio.
Recupera el ritmo normal de tu respiración y corazón.
Coloca las manos sobre tu cintura.
Respira. Siente.
¿Hay algo ahí? ¿Una energía, una emoción, una memoria?
¿Qué es lo que más vivamente sientes ahora?
No necesitas entenderlo. Solo estar y sentir.
Sin juicios.
Apartemos en lo posible la actividad mental.
Hoy no es cuestión de esfuerzo, sino de entrega.
Tu cuerpo es tu templo. Y ya está empezando a abrir las puertas.
No es necesario ser distinto a como eres.
No hay una manera mejor de hacer las cosas en tu mundo y cuerpo que como tú las haces ahora.
Se trata de ahondar en ese sentir ajeno a pensamientos, antes de estos.
Hay una sabiduría muy productiva y sanadora antes de la inteligencia o la razón.
Y habita, como ya has comprobado, en tu cuerpo.
Que tengas un buen día.
🔁 ¿Quieres empezar el camino desde el principio?