Circula en la red esta interesante composición que muestra cómo esta situación nos está obligando (invitando) a confrontarnos con nuestras sombras, con nuestros miedos. Confrontarnos con esas zonas de nuestra persona que normalmente conseguimos ignorar por medio de todas las distracciones que nos brinda vivir en sociedad.
Una de las conclusiones que gran parte de personas han visto confirmadas en su experiencia, es que sólo nos tenemos a nosotros mismos y a la sociedad de la que formamos parte. Los estados y gobiernos pueden ser más o menos eficaces en su gestión -necesaria, cuando hablamos de la convivencia de millones de personas-, pero en último extremo, en nuestro calado interior, lo que realmente nos va a ayudar a salir mejorados y fortalecidos de esta situación será nuestra actitud interior y el encuentro con «el otro»; el encuentro con las otras personas que -como nosotros, cada cual en su modo y circunstancias-, está atravesando este periodo de confinamiento planetario.
Teorías aparte sobre los fines y causas que han dado origen al covid-19, en este periodo de confinamiento forzoso podemos dedicarlo a observar lo que tan bien señala ese gráfico: observarnos sin testigos y ver hasta qué punto y en qué aspectos de nuestra persona transitamos entre el rechazo o la aceptación de lo que es.
En este estado de confinamiento que posiblemente se prolongue por meses, aprovechemos la ocasión para hacernos al menos amigos honestos de nosotros mismos.
- Alegría
- Amanecer
- Amor
- Armonía
- Atreverse
- Barreras mentales
- Caos
- Certeza
- Consciencia
- Consumismo
- Coraje
- Creatividad
- Crisis
- Curiosidad
- Dios
- Educación
- Ego
- El poder del Corazón Puro
- En la red
- Energía
- Entrega
- Espiritualidad
- Felicidad
- Globalización
- Gratitud
- Guerrero espiritual
- Herramientas
- Humanidad
- Inocencia
- Libertad
- Mente
- Miedo
- Muerte
- Paz
- Perdón
- Realidad
- Relaciones
- Renacer
- Respiración
- Riesgo
- Salud
- Silencio
- Superación
- Tierra
- Tristeza
- Vida
- Zen
