El VIAJE DE RIDDHI

Preguntitas sobre dios -Atahualpa Yupanqui

Un tema que supuso para su autor 100 días de prisión.

Este dios es el dios recreado por los poderosos. Es un dios disfrazado con las sombras de nuestra humanidad. Ese dios que nos habita y que nos hace callar y decir sí, por miedo o conveniencia, aunque en el fondo todo sepamos que vivimos en un no.

Existe un dios, Dios, que nada tiene que ver con el dios de los poderosos, de los limitantes, de los justificadores; de los que gozan con loas a su magnificencia -ya sean líderes, partidos u organismos del sistema-. Magnificencia que, como este dios menor, es pura fachada, mera apariencia por conveniencia -miseria y cobardía, estrechez y ceguera.

A ese Dios vivo, desligado de religiones y cultos. A ese Dios que ama lo humano en toda su contradicción, en su Inteligencia, en su Fuerza y en su Amor.

Ese Dios, a veces, se expande en una multitud que sale a la calle y en comunión pacífica dice desde su atronador silencio, sólo con su presencia: Basta.

Un día yo pregunté: Abuelo, dónde está Dios. Mi abuelo se puso triste, y nada me respondió.

Mi abuelo murió en los campos, sin rezo ni confesión. Y lo enterraron los indios, flauta de caña y tambor.

Al tiempo yo pregunté: ¿Padre, qué sabes de Dios? Mi padre se puso serio y nada me respondió.

Mi padre murió en la mina sin doctor ni protección. ¡Color de sangre minera tiene el oro del patrón!

Mi hermano vive en los montes y no conoce una flor. Sudor, malaria, serpientes, la vida del leñador.

Y que nadie le pregunte si sabe donde está Dios. Por su casa no ha pasado tan importante señor.

Yo canto par los caminos, y cuando estoy en prisión oigo las voces del pueblo que canto mejor que yo.

Hay un asunto en la tierra más importante que Dios.

Y es que nadie escupa sangre pa que otro viva mejor.

¿Que Dios vela por los pobres? Tal Vez sí, y tal vez no. Pero es seguro que almuerza en la mesa del patrón.

Categorías: El poder del Corazón Puro

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