Todos somos maestros y discípulos.
Ser maestro es fácil, muy fácil. Nacemos, vivimos y morimos siéndolo sin que tengamos que hacer nada especial para ello.
Ser discípulos es más difícil porque sólo nacemos con la semilla que habremos de desarrollar con nuestro trabajo, si así lo deseamos…. (más…)