L
ENTREME DONDE NO SUPE,
y quedeme no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
Yo no supe dónde entraba,
pero, cuando allí me vi,
sin saber dónde me estaba,
grandes cosas entendí;
no diré lo que sentí,
que me quedé no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
A
A
De paz y de piedad
era la ciencia perfecta,
en profunda soledad… (más…)