Wonderland from juanarmas
Durante cuatro meses, el reconocido artista coreano Yeondoo Jung supervisó clases de arte en cuatro jardines de infancia en Seúl y recogió 1.200 dibujos realizados por niños entre cinco y siete años.
«Wonderland» convierte estos dibujos en realidad fotográfica sin recurrir a efectos gráficos generados por ordenador.
Esta presentación es un pequeño tributo a su imaginación y su trabajo.
[Para apreciar mejor su contenido, recomiendo la página de slideshare. Pulsa luego la opción «full» -en el margen inferior derecho- y podrás verlo así a pantalla completa.]
Que lo disfrutes como un niño 🙂
Categorías: Arte, Belleza, Curiosidad, El poder del Corazón Puro, En la red, Fotografia, Gratis, Humanidad, Internet, Música, Paz, Vida
Ya lo creo que lo he disfrutado, Juan. Me encanta la originalidad del proyecto.
Un abrazo
Hola Concha,
A mí también me pareció original cuando lo conocí. La capacidad imaginativa de los niños, libre del filtro de la razón, y la capacidad técnica y artística de su autor, para conseguir plasmarla en estas imágenes.
Un abrazo y gracias por el comentario,
Juan
«Ver» a través de los ojos de un niño, como ellos interpretan el mundo y las cosas que los rodea. Es sorprendente lo que podemos descubrir de nosotros mismos y del mundo a partir de lo que ellos observan. Volver a ser niños y mirar con los ojos de la inocencia, de lo «no aprendido». Recrear ese mundo… volver a encontrarnos con nuestro niño interior.
Gracias Juan… bella presentación y muy significativa, tanto la música como las imágenes.
Abrazos 🙂
BeT
No dar nada por sentado, no tener una personalidad que defender y afianzar ante los demás… Poder así «ver», como dices, con la inocencia de un niño y permitirnos la capacidad de sorprendernos.
Esa capacidad, unida a la sana madurez que da la experiencia, creo que constituyen dos de los principales ingredientes del arte del disfrute de la vida.
Gracias por tu comentario y tu presencia.
Abrazos,
Juan
Qué bonito ver el dibujo de un niño. ¡No hay juicio!, sólo autenticidad sin distorsión.
Gracias niño por traer estas cositas a tu web, afines a «El poder del corazón puro». Los telediarios podían tener un espacio fijo para difundir esta otra realidad ¡que también existe!
Un abrazo,
José
Gracias José,
Si algo nos enseñan los niños es a vivir el placer del instante.
Un abrazo,
Juan