¿Cuántas veces hemos buscado la felicidad en lo que nos rodea… en personas, en logros, en circunstancias externas? Y, sin embargo, tarde o temprano, la sensación se desvanece.
Vivimos en un mundo que nos alienta a lograr metas para hallar la anhelada felicidad, y ya sea dinero, poder, placer o reconocimiento social, la felicidad no nos llega porque no viene de afuera.
Antonio Blay, pionero en la psicología transpersonal, nos invita a detener esta búsqueda interminable.
La verdadera felicidad no depende de lo que sucede fuera de nosotros, sino de abrirnos a la presencia interior de Dios como amor absoluto y plenitud.
Él mismo ha aclarado que el término Dios lo emplea por su educación, pero que comprende que cada persona lo adecúe a sus gustos y circunstancias. El término – Dios, Vida, Energía, Universo, Inteligencia – es sólo un señalizador. Lo que cuenta es la vivencia de la experiencia.
En este nuevo vídeo —con audio mejorado y subtítulos integrados— Blay nos recuerda que la felicidad no se acumula ni se posee: se descubre en el reconocimiento de nuestra propia fuente interior. Y al darla, paradójicamente, crece más, se ahonda, se empodera. Lo exterior puede despertar destellos de esa fuerza, pero la raíz de la Felicidad en mayúscula está en nosotros.
La práctica que nos sugiere es simple y transformadora:
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Meditar en la naturaleza de Dios como felicidad y amor.
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Relajar la mente, el corazón y la voluntad.
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Permanecer en silencio, receptivos a esa presencia que ya habita en nosotros.
Cuando dejamos de depender de lo exterior y nos abrimos a lo interior, descubrimos que la plenitud es nuestra herencia presente. Un cambio de actitud que, como decía Blay, exige disciplina al principio… pero que nos conduce a la libertad y a la alegría constante.
👉 Puedes ver el vídeo completo aquí: [El Secreto de la Felicidad]
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¡Qué maravilloso artículo! Me encantó cómo Antonio Blay nos recuerda que la felicidad está dentro de nosotros. La práctica de meditar en Dios como amor es sencilla pero transformadora. ¡Definitivamente un llamado a abrirnos a lo interior! 🙏
Este artículo me pareció muy inspirador. La forma en que Antonio Blay explica la felicidad como algo interior es tan clara que parece una revelación. La práctica que sugiere es sencilla pero profunda. ¡Definitivamente merece la pena reflexionar más sobre ello!