No es un video más, ni una bienvenida formal.
Es una llamada.
Se titula simplemente “VEN”, y aunque este canal lleva ya tiempo compartiendo contenido, este video recoge el espíritu que lo sostiene.
Una palabra breve, desnuda, que abre paso.
Una invitación sin promesas ni exigencias, pero con un eco que quizás resuene dentro.
Ese ven nace de una frase de Rumi, el poeta místico del amor, y contiene un fragmento del libro El viaje de Riddhi, el texto que dio origen a este espacio.
En ese fragmento se señala una de las enseñanzas más esenciales -y a la vez, más difíciles de vivir-:
aprender a amarnos.
Todo lo que se ha compartido aquí -reflexiones, meditaciones, entrevistas, lecturas, sabidurías antiguas y actuales- tiene sentido solo si nace de ahí.
Ese amor es el hilo invisible que une el blog, el canal y el libro.
El amor resurge cuando la herida empieza a sanar.
La herida empieza a sanar cuando la acogemos.
La acogemos cuando nos permitimos sentir.
Y sentimos cuando, por fin, nos ayudamos a escuchar esa voz silenciosa, compasiva y paciente
que nos sigue llamando, una y otra vez:
Ven.
Ven.
Ven.
Una vez más: VEN.